Los departamentos que prendieron fuego, nada tenían que ver con este señor. Una de las dueñas comenta con mucha tristeza: "Si yo no mandé preso a nadie, por qué me hicieron esto".
El mensaje es claro, si mandás un pibe preso te robamos y te incendiamos la casa. Ese es el límite que la comunidad entera y sin compromisos deja que se vaya desplazando a favor de los delincuentes.
El otro mensaje es:"para que vas a denunciar si los mismos policías saben quienes son los chorros y después les dicen". Conclusión, se pierde la confianza en esa institución. La policía que actúa como auxiliares de la justicia, pasa a estar en la misma vereda que los delincuentes. Entonces ¿A donde vamos? ¿A la justicia? Si los dejan en libertad más rápido de lo que tardan en vaciarte una casa. Y!!! ¿Qué hacemos? Nos quedamos en casa detrás de nuestras propias rejas.
Pero la inseguridad no termina aquí, con el robo a mano armada o los incendios en las casas robadas. También hay medios de comunicación que se creen que por "viejos" en la zona son confiables. Hace unos días escucho en una radio fm de Santa Teresita que entre los asaltados, figuraba en la lista un conocido negocio de la avenida 41 y calle 7, "Top RanK". Hoy me acerco al negocio y charlando con el dueño le hago el comentario de lo que había escuchado, con asombro veo que se empieza a reír y me comenta lo que había sucedido.
-"Ese día habían asaltado el super Chaar -un caso muy conocido en esta localidad- y uno de los chorros que tenía un arma de fuego se fugó -comenta el hombre- y en la esquina de mi negocio paran tres patrulleros porque se ve que lo habían interceptado por estos lugares - señalando la ubicación de los móviles-y justo pasa el gordo en la camioneta, ve todo el despliegue y pensó que me habían asaltado a mi. Pero podría haber pasado al otro día y preguntarme". Al día siguiente el dueño de esta FM comentaba del robo a este negocio -que nunca fue robado. Muchas personas se acercaron al negocio a preguntarle que había pasado, después de escuchar ese comentario en esa radio.
Seguimos rompiendo el tejido social, este tipo de actitudes lastiman, junto a otros sucesos, la tranquilidad de una comunidad. Por nombrar un caso.
El tema es más serio de lo que parece. Voy a decir lo de siempre, NO SE PUEDE SENTAR DETRÁS DE UN MICRÓFONO Y HACER RADIO DE ESTA MANERA.
Quien habla del inmenso mercado de existe en el Partido de La Costa de los artículos robados. Este debe ser uno de los pocos lugares, donde no hace falta cercarlo policialmente para que los delincuentes no puedan salir con elementos robados de La Costa. Aquí se comercializa todo, se desarma, se pinta y se vuelve a vender. Bicicletas, repuestos de autos y motos.
La gente no quiere comprometerse, tiene miedo y no encuentra salida. Todos hablan y conocen los lugares donde viven los delincuentes. El lugar es muy pequeño, pero nadie pone "el gancho". Nadie quiere judicializar una denuncia verbal.
Mientras tanto, los chicos ya no pueden ir a la plaza como antes. A bailar tampoco, la provocación y los incidentes que terminan afuera de los boliches, preocupan a esos padres que esperan que sus hijos, regresen a sus casas sanos y salvos.
Los límites no los marca la gente, la siguen marcando los delincuentes. Insisto, hay mucha connivencia.