El viernes pasado, comenzamos con un ciclos de charlas comunitarias dialogando sobre el suicidio. Organizada por un grupo de profesionales de Salud mental y Comunicación Social especializado en el área. Las Licenciadas en Psicología Roxana Ambrueso, Maria Laura Fuentes, Soledad Moya y el Profesor en Comunicación Social Ariel Fontana, forman parte del staff de NEURO COSTA, que realiza charlas itinerantes sobre el suicidio.
Este trabajo nace desde una demanda implícita y que en la actualidad se sigue hablando desde la distancia, también podríamos decir que desde el ostracismo, el silencio ha sido su mejor aliado. La cifras que arrojan tanto la OMS - Organización Mundial de la Salud- y la OPS -La Organización Panamericana de la Salud-, son muy fuertes. En edades tempranas y en adultos mayores, son las cifras más altas de tasa de suicidios. Los escenarios sociales son variados, desde el confinamiento en la pandemia, hasta lugares de encierros, cómo las Unidades penitenciarias, hasta los anuncios por redes sociales y otras situaciones provocadas por la depresión y trastornos de ansiedad entre otros.
Lo cierto es que del suicidio no se habla, ni en los medios, ni en las redes sociales a menos que una persona se haya quitado la vida con métodos de ahorcamiento, ingesta de plaguicidas o por armas de fuego. Sólo interesa saber cuantos años tenía, el por qué de la decisión, desatándose un sinfín de conjeturas. El hecho es publicado en la sección policiales y de allí pasa a judiciales. Cuando el suicidio es un tema de salud mental, de una persona que rara vez se quita la vida en su primer intento. Por el contrario, pidió ayuda, pasó por más de un intento y no consiguió que lo escucharan, que lo atendieran. Nuestro sistema de salud mental está en plena decadencia desde hace unas décadas. No hay inversión para el trabajo de más profesionales. Las áreas designadas por el Estado son precarias y con mucha ausencia del personal.
Este ciclo de charlas a la comunidad NEURO COSTA, tiene como objetivo construir espacios de diálogo, para ocuparse de este tema en la comunidad costera, para recolectar datos sobre casos de intentos de suicidios, contención a familiares que viene sufriendo esta problemática y poder darles las herramientas necesarios para reducir, a través de la prevención, la tasa de suicidios en nuestra comunidad. Hoy los indicadores de la provincia de Buenos Aires, da una persona por día que se suicida.
Cada charla está programada para despertar un interés responsable y respetuoso, con otro de los objetivos coyunturales: Concientizar, psicoeducar y preparar a las personas para una escucha atenta y así poder "DETECTAR, DISUADIR, DERIVAR".
El suicidio es una problemática social, en donde se necesita mucha contención, muchos recursos y sobre todo HABLAR del tema. Las primeras charlas son sobre los mitos y protocolos que uno debe tener en cuenta. Así como hoy, si encontramos una persona herida en la calle, no la tocamos e inmediatamente llamamos al 911, el suicidio tiene sus protocolos desde el momento de evitar un intento. Si logramos hablar con esa persona, tal vez desista de su ideación suicida y la cambie por una opción mejor.